Para contribuir eficazmente en la formación integral de nuestros estudiantes, como docentes estamos llamados a educar, formar y potenciar las habilidades sociemocionales de éstos. Para ello se hace necesario trabajar estos aspectos de una manera formal y sistemática.
Entenderemos el aprendizaje socioemocional como el proceso mediante el cual los niños y adultos adquieren y desarrollan conocimientos, habilidades y actitudes que les permiten lograr el autoconocimiento, comprender y autorregular las emociones y su expresión, motivarse para establecer y alcanzar objetivos positivos, empatizar con los demás, construir y mantener relaciones positivas, tomar responsablemente sus decisiones y manejar de manera efectiva situaciones desafiantes (Goleman, 1996; Bisquerra, 2000; CASEL, 2019).
Para Punset Bannela E. (2019) "la educación emocionalmente inteligente enseña al niño a tolerar la frustración y a comprender y aceptar que los demás también tienen necesidades y derechos”.
Como señala Bisquerra, R., (2007), El desarrollo de las habilidades socioemocionales adquiere suma importancia no solo para el logro de un aprendizaje escolar exitoso, sino también para la vida en sociedad. Por lo tanto, comprender el desarrollo de las capacidades socioemocionales en las escuelas se convierte en una cuestión central para el desarrollo de la adultez y de la vida en sociedad.
Los profesores juegan un papel fundamental en el modelado y la enseñanza de habilidades socioemocionales y en fomentar una mentalidad de crecimiento positivo en las escuelas, Bergeron, L., Dean, M. (2013) en Fernandez, G (2019).
Considerando lo anterior, el tema se torna cada vez más necesario ya que, en tiempos de crisis y tal como lo estamos vivenciando en el contexto provocado por el Covid-19, en donde se ha visto evidenciada esta necesidad con mayor ímpetu, es que resulta ineluctable generar instancias para el desarrollo de aspectos como; reconocer las emociones, trabajarlas y potenciarlas, para que de esta manera los estudiantes cuenten con las herramientas necesarias para sortear de manera eficaz las adversidades, más aún en tiempos que se vislumbran cada vez más inestables producto de la serie de cambios que se experimentan a nivel global, ya sea por los avances tecnológicos como por la manifestación de nuestro planeta provocado por el cambio climático.
Es importantísimo considerar lo emocional como un aspecto central que favorece el desarrollo integral, más allá de la inteligencia conceptual: Lenguaje, Matemáticas y Ciencias. Y tanto el currículum como la enseñanza en Chile se basan fundamentalmente en esta inteligencia, quedando definida por las habilidades que el sistema escolar define como buenas o deseables de ser desarrolladas y que no necesariamente educa a los niños en habilidades siglo XXI que les demanden nuevas formas de pensar y de hacer para construir su futuro y el de la sociedad, Rosas (2003) en ALARCÓN C. y Riveros Larissa (2017 en Fernández G. (2019).
Uno de los aspectos fundamentales para generar bienestar es inculcar y fomentar desde pequeños la actitud o fortaleza del agradecimiento. Ser agradecido es esencial para apreciar y disfrutar plenamente la vida. Agradecer lo que somos, lo que hemos conseguido, lo que tenemos, las personas que nos rodean. Nos permite vivir en armonía con nuestro entorno y con un alto grado de bienestar.
Según la Real Academia Española, la palabra gratitud se deriva del latín gratia, que significa favor, y de gratus, que significa agradable o grato.
Robert Emmons (2008) en Velasco G. (2016) uno de los principales investigadores de la gratitud a nivel mundial, señala que la gratitud es el reconocimiento de bondad de nuestras vidas. Afirmamos que, en rasgos generales, la vida es buena y tiene elementos que hacen que la vida valga la pena vivirla. El reconocimiento por haber recibido algo que nos gratifica, bien sea por su presencia o por el esfuerzo que hizo el donante para elegirlo".
Otros estudios señalan que la gratitud mejora el rendimiento académico en el aprendizaje y ayuda a consolidar una educación humanística. Los estudiantes experimentan más gratitud y optimismo, mejora las relaciones con sus compañeros, aumentando la satisfacción y bienestar en la escuela.
Intencionar actividades en el aula tendientes a reconocer la emoción de la alegría y felicidad en sus propias experiencias, inculcando la actitud o fortaleza del agradecimiento a través del modelamiento, favorece el pensamiento positivo, la resiliencia y en definitiva les permite a los estudiantes ser más felices.
Bibliografía
Vivas, Mireya La educación emocional: conceptos fundamentales. Sapiens. Revista Universitaria de Investigación. 2003;4(2):0.[fecha de Consulta 5 de Agosto de 2021]. ISSN: 1317-5815. Disponible en: https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=41040202(link is external)
Londoño, Camila, El frasco de la felicidad: una gran idea para desarrollar el pensamiento positivo en los niños, disponible en https://eligeeducar.cl/ideas-para-el-aula/el-frasco-de-la-felicidad-una-...(link is external)
Bisquerra Alzina, Rafael, Pérez Escoda, Núria Las competencias emocionales. Educación XX1 [en línea]. 2007, 10( ), 61-82[fecha de Consulta 5 de Agosto de 2021]. ISSN: 1139-613X. Disponible en: https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=70601005(link is external)
Fernández, Gisela, 2019, ¿Por qué el desarrollo de las habilidades socioemocionales en las aulas de nivel medio son necesarias?, disponible en https://www.teseopress.com/neurociencias/chapter/55/(link is external)
Alarcón, Cielo y Hidalgo, Larisa (2017) Educación Socioemocional: Una Deuda Pendiente en la Educación Chilena, disponible en https://repositorio.udd.cl/bitstream/handle/11447/2022/Documento.pdf?seq...(link is external)
Velasco Garry, 2016 La Gratitud en Educación, disponible en https://gerryvelasco.wordpress.com/2016/10/14/la-gratitud-en-la-educacion/(link is external)
NOTA: Para trabajar este contenido se adjunta planificación de una clase de Orientación, dirigida a un cuarto año básico. En la cual se organiza una clase en la que se invita a los estudiantes reconocer la emoción de la felicidad en sus propias experiencias y desde ahí generar espacios para consolidar la fortaleza o sentido de gratitud.
Cabe señalar que la técnica del Frasco de la Felicidad es una práctica que se realiza semanalmente con este grupo de estudiantes, los cuales se han mostrado muy motivados y atentos a reconocer aspectos de su vida que los lleva a elevar la emoción de la felicidad y la actitud o fortaleza del agradecimiento. Se adjunta fotografía que muestra evidencia de la actividad.
Se cuenta con autorización de los padres para exhibir imágenes de sus hijos.
Archivos adjuntos
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