1. Formación continua en el área que se desempeña y participación en programas de mejoramiento continuo. La participación constante en programas de formación profesional, tanto en el área de educación como en las disciplinares, es muy importante para ser parte de una red de aprendizaje entre pares. Desde los años de estudios universitarios se puede participar en congresos y encuentros con la finalidad de potenciar saberes y adquirir herramientas para poder implementar en lo que será el ejercicio docente. En formaciones posteriores, como el Magíster en Educación, pude aportar en el área de gestión curricular, mientras que, en un programa de didáctica de la Matemática en la Universidad de Salamanca, se me permitió mejorar mis prácticas en la enseñanza de esta asignatura, porque adquirí estrategias, recursos y herramientas para la enseñanza de esta disciplina. Con la experiencia acumulada quise ponerla al servicio de otros, postulando al programa de Mentorías de Enseñanza Media, siendo partícipe del primer grupo de mentores en este nivel en la región del Bío Bío, donde adquirí nuevos conocimientos en el ámbito del rol del mentor para profesores principiantes. Todo lo anterior ha sido un camino que hoy se cruza con el ingreso a la RMM donde espero aprender de mis pares y también poner a disposición de otros mis conocimientos.
2. Buenas relaciones profesionales y de equipo y creación de un clima favorable. La personalidad y forma de trabajo permite al docente formar buenas relaciones profesionales y de equipo en sus lugares de trabajo. Desempeño mis funciones en dos instituciones educativas, donde destaco la buena relación y convivencia con mis colegas, siendo empático y respetuoso con el trabajo del otro. He establecido relaciones cercanas con ellos con el fin de dialogar de manera respetuosa, resolviendo conflictos a través del diálogo y la escucha activa, manteniendo una actitud de respeto y valorando los aportes que cada uno realiza en beneficio del logro de aprendizajes de nuestros estudiantes. Considero que la forma en cómo se relaciona un docente con sus pares contribuye positivamente en el rol que asuma en cada escenario.
3. Resultados obtenidos, dominio de la disciplina y manejo de información actualizada de mi profesión, sistema educativo y políticas vigentes. Los resultados obtenidos en el ejercicio docente, tanto en el proceso de evaluación docente como en la prueba de conocimientos específicos y disciplinarios, dan cuenta del dominio curricular que maneja el docente como también de la actualización de las políticas vigentes de nuestro sistema educativo. Llegar al tramo avanzado es lo esperable en nuestro desempeño docente, pero ello no es limitante de acceder a los tramos voluntarios de experto I y experto II, pues la formación continua, tanto en la propia disciplina como en políticas vigentes y el compartir los aprendizajes con los pares son claves para lograr los resultados de un óptimo desempeño y ser parte de una red de aprendizaje colaborativo que permita el aprendizaje y desarrollo de habilidades de nuestros propios estudiantes.
4. Capacidad para crear instancias colaborativas dentro del establecimiento. Debemos ser docentes en acción, no sólo quedarnos con el conocimiento sino también transformarlo en actividades e instancias que permitan el aprendizaje tanto de los estudiantes como también de nuestros pares. Es así como, a modo de ejemplo, puedo mencionar algunas acciones en las cuales he sido partícipe y gestor en mi establecimiento: elaboración de actividades matemáticas en equipo con docentes de distintas áreas, fomentando el aprendizaje entre pares y mejorando el de cada estudiante; talleres de formación matemática a profesoras de educación diferencial para integrar contenidos relativos a enseñanza media que ellas trabajan con alumnas de este nivel; encuentros de matemática en familia para incentivar la participación de los padres y apoderados de nuestras alumnas en actividades de aprendizaje; identidad del departamento del matemática del establecimiento con la creación de un logo distintivo y página en internet que permite compartir las actividades realizadas con la comunidad escolar; instancia de participación con docentes de historia y artes para trabajar de forma integrada un tema. Esto ha permitido mejorar los aprendizajes estudiantiles como también la formación de redes de apoyo entre colegas. El trabajo colaborativo permite seguir mejorando, seguir creciendo y seguir contribuyendo a la formación y desarrollo de los estudiantes.
5. Capacidad de autocrítica y reflexión analítica de las propias prácticas. Afortunadamente, en el establecimiento educacional han existido constantes instancias de conversación y reflexión de nuestras prácticas, las que ocurren con otros docentes, con utp y con el equipo directivo, de modo de analizar el desempeño en aula, lo que van en directa relación con los aprendizajes del alumnado. La capacidad de autocrítica y estar abierto a la crítica constructiva permite analizar profundamente la labor docente, identificando fortalezas y desafíos, mejorando así el actuar pedagógico.
6. Visión sobre diversidad y equidad de género comprendiendo la educación como un proceso integrado al desarrollo social. El trabajar en un colegio de mujeres durante todos estos años permite reflexionar sobre la gran importancia del rol de la mujer en la sociedad y el aporte que han entregado en las diferentes áreas del saber, de modo de colaborar en el empoderamiento de su rol en esta sociedad. Compartir lo aprendido en este ámbito con otros colegas que tienen realidades distintas es un deber que tenemos los docentes y que es necesario abordar debido a los cambios que la sociedad ha tenido y la evolución de las nuevas generaciones, así la labor se centrará en el aprendizaje de todos y todas para construir una sociedad más justa y equitativa.
Profesor Gonzalo Reyes Montoya
Colegio España. Concepción
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