Este artículo nos orienta sobre la importancia de la salud mental y su deterioro tras la pandemia.

En una entrevista realizada por Silvia Rodríguez a la psiquiatra Nuria Núñez, "Licenciada en Medicina por la Universidad de Cádiz y especializada en Psiquiatría en el Hospital Universitario de Álava, donde recibió el premio final de residencia por su destacada trayectoria de investigadora; con más de diez años de experiencia, se dedica a la evaluación, diagnóstico y tratamiento de diversos trastornos mentales, emocionales y de comportamiento, especialmente en déficit de atención e hiperactividad, depresión, ansiedad, autismo, bipolaridad, trastornos de la conducta alimentaria y trastornos psicóticos", se nos comenta cómo las familias y los docentes pueden ayudar en el proceso de detección y recuperación.

Concienciación sobre el aumento de trastornos mentales: Tras la pandemia, ha habido un incremento significativo de trastornos mentales en niños y adolescentes. Es fundamental intervenir de manera temprana para abordar estos problemas de manera efectiva.

Involucrar a familias y educadores: Es esencial que las familias y los educadores desempeñen un papel activo en la detección y apoyo de los estudiantes con problemas de salud mental, reconociendo la importancia de su rol en este proceso.

Buscar recursos y formación: Se deben demandar más recursos y formación especializada para los centros educativos, permitiéndoles enfrentar adecuadamente los problemas de salud mental entre los estudiantes.

Prestar atención a los signos de trastornos mentales: Es crucial estar atentos a los cambios en el comportamiento de los menores como posibles signos de trastornos mentales y actuar de manera proactiva buscando ayuda profesional.

Fomentar el apego seguro: Promover el desarrollo de un apego seguro en los niños mediante cuidados consistentes y efectivos por parte de padres y cuidadores es fundamental para protegerlos de futuros trastornos mentales.

Abordar la depresión tempranamente: No se deben ignorar los síntomas de depresión en los menores, ya que una intervención adecuada puede prevenir efectos negativos a largo plazo en su vida adulta.

Adaptar el entorno educativo: Es necesario crear un entorno escolar que apoye y acompañe a los estudiantes con problemas psicológicos, adaptando contenidos y evaluaciones según sea necesario para su bienestar.

En resumen, el texto nos invita a tomar conciencia de la crisis de salud mental post-pandemia entre los jóvenes, a involucrarnos activamente en su detección y apoyo, y a demandar mejores recursos y formación para enfrentar este desafío de manera efectiva, si bien esta temática corresponde a realidad de otro país, ésta se puede adaptar fácilmente a nuestra realidad como país.

Como docente, realizo actividades tan simples como escuchar y dar espacio para compartir experiencias. Al inicio de mis clases, por ejemplo, vemos videos cortos sobre diferentes temas: humor, reflexión, música, karaokes, etc. Después dedicamos un breve tiempo para conversar y relacionar el tema del video. Esto facilita risas, confesiones, reflexiones e interacciones entre los estudiantes. En el fondo, se generan espacios de confianza y apego.

Adjunto el link con la entrevista completa https://www.educaciontrespuntocero.com/entrevistas/nuria-nunez-psiquiatra/ [2]

Adjunto actividades de reflexión que se pueden adaptar a los estudiantes de segundo ciclo básico y se pueden desarrollar en hora de Orientación. De igual forma se adjuntas actividades que se pueden desarrollar en alguna reflexión docente.