El presente problema tiene el peso de la vida real, por lo tanto es muy interesante plantearlo a las y los estudiantes. En el contexto en el cual me desenvuelvo, es común que nuestr@s estudiantes ayuden a su familia en la recolección de leña para el invierno. Nuestra localidad, Mulchén, tiene un invierno muy duro. De allí que este problema tenga mucha potencia pedagógica y significancia para ellas y ellos. En las oportunidades que lo he trabajado con 6º año básico, genera mucho debate e intercambio de ideas entre las y los discentes, por lo que es muy apropiado para pedir argumentaciones matemáticas de tal situación. 

El problema es el siguiente:

Mi vecino Bernardo vende Leña, pero no sabe si le conviene venderla, por metro, por astilla o por saco. ¿Qué le convendrá más? ¿Que información falta para resolver el problema? ¿Es mejor por metro, por astilla o por saco? ¿Cuántas astillas hay en un metro? ¿Y en un saco? ¿A cómo está el precio de la astilla? ¿Cuánto vale el saco? ¿Qué le acosejamos a mi vecino? A primera vista, pareciera que es más conveniente por astilla, pero será tan así. La instancia permite desafiar a las y los estudiantes para identificar la información que no está entregada en el problema, ya que la mayor parte de los problemas a los que nos enfrentamos requieren investigar, indagar para encontrar la información necesaria para dar respuesta a las interrogantes, lo atractivo de esta situación es que la mayoría de la información que falta para resolver el problema surge de las y los propios estudiantes y su contexto.